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El básquet APB necesita más transparencia

La Asociación Paranaense de Basquetbol cuenta con dirigentes probos, honestos, responsables, moralmente irreprochables. No hay duda alguna o no se discuten las virtudes morales de sus autoridades. Ahora bien… Algo ocurrió desde hace un tiempo con el transparentar diferentes cuestiones. Por ejemplo, los informes de los jueces, los dictámenes del Tribunal de Penas, y los debates en reuniones de delegados con Mesa. Vale la pena detenernos en una sanción: suspensión de TRES MESES a un árbitro. ¿Qué pasó?

En el Boletín N° 598, con fecha 24 de junio, se lee el siguiente fallo del Tribunal de Penas: “Aplicar al árbitro Sr. Santiago Giordano, M.I. Nº: 38.260.869, la pena de SUSPENSION de TRES (3) MESES, a contar desde el día 13 de junio de 2013, para arbitrar partidos oficiales y/o amistosos, de acuerdo a los art. 5, 7, 10, 14, 89 Inc. d) y conc. del Código de Penas de la CABB“

¿Qué pasó?… Ni siquiera hay una presentación de informe previo a ésta resolución que pudiera LIGAR el o los casos.

Todo lo que sabemos es EXTRAOFICIAL pues ni siquiera desde la Asociación Argentina de Árbitros Filial Paraná se le concedió trato especial a esta situación y, vía charlas privadas con algunos jueces, solo logramos recabar datos aislados, en una actitud corporativa de la AAAB con la cual disentimos pues consideramos que por sobre las penumbras debe aplicarse la luz de la VERDAD por más dolorosa que sea. Solo así se CRECE.

Presuntamente, durante un juego de Categorías Formativas, un miembro de mesa de control incurrió en un exabrupto, habría sido penado por el árbitro y ello supuestamente derivó en una discusión oral que, aparentemente continuó en Facebook con conceptos injuriosos, en especial con algunos manifiestos que enlodarían al árbitro por su INVESTIDURA.

Intentamos obtener mediante los partes de la APB mayores precisiones pero una medida asumida por la Mesa Directiva, impide desde hace unos meses lograr mayor cristalinidad a diferentes cuestiones, entre ellas, solo se habla de “Informes de los árbitros tal. y cual”, partido Categ. “x”, entre tal club y cual club. Pero ni siquiera se titula ello con un:

-“por agresión al juez”

-“por insultos”

-“por falta de firma de planillas”

-“por problemas con el tablero”

O por cualquier otra vicisitud que dificulte el obrar de los mismos en una contienda.

Algún “iluminado” consideró que mejor era imponer un Silenzio Stampa. De hecho que, a la falta de contenido básico de informes de los jueces, también pareciera que se le agregó un “cepo” a las expresiones de los delegados en reuniones con Mesa Directiva, si nos atenemos a la calidad ilustrativa de hace unos meses y a la actual.

O bien hay que creer que los representantes de los clubes no debaten, no discuten nada que se trate en el seno asociativo.

Una pena pues habíamos elogiado el inicial proceder de la Asociación. Hoy, esa especie de silencio que se aprecia, o la falta de clarificación a cuestiones como ésta del juez mencionado, solo echan a circular versiones que conspiran con la buena imagen que se pretende tributar a un básquet amateur al cual cuesta conferirle una trascendencia mayor que evite ser tan tapado y hasta menospreciado al lado del caudal informativo de Liga, TNA, TFB o hasta Liguilla.

Desde hace rato, la APB necesita MAYOR poder difusor. No alcanza con tener buenos periodistas en el área respectiva, inquietos, con las mejores intenciones, con los mejores propósitos. Es imperioso contar con una dirigencia que NO TENGA TEMOR en revelar el DISENSO, la DISCREPANCIA, las PROBLEMÁTICAS que impiden conferirle a nuestro básquet local un cuadro, un perfil más POSITIVO.