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Echagüe sin margen de error

Si Echagüe le gana ésta noche a Unión Progresista transfiere toda la responsabilidad, tensión, apremio, ansiedad, angustia a los chaqueños. El 4° juego de la serie de Cuartos de Final, Región Norte, arranca a las 21.30 con arbitraje de Pedro Enrique Hoyo y Matías Eduardo Gabe, oficiando de Comisionado el ex internacional José Palacio. Si se impone el equipo de Jorge Lobera accede a semifinales.

Echagüe dio muestra cabal el lunes que aún está en carrera. Se reformuló la defensa, poniéndose más vigor, rigor y actitud, como reapareció a pleno Mauro Rotschy y David Oviedo se hizo cargo de la conducción poniendo autoridad y mayor orden que en suelo norteño.

Pero además, Maurice Spillers volvió a influir fiel a su oficio, Iván Basualdo y Mauro Negri robustecieron el área interna, el pibe Rodrigo Haag ofreció variables para liberar al base neuquino y Román Rodríguez como Carlos Sepúlveda aportaron alternativas tan útiles como oportunas en lapsos claves del tercer encuentro.

El pecado del “Negro” sigue siendo el distraerse por instancias y no lograr imponer una supremacía sin tantas oscilaciones y de modo fundamental, perdiendo pelotas que derivaron en letales contragolpes de la visita.

Progresista redescubrió la incidencia de Pablo Osores desde el perímetro, halló soluciones vía César Avalle y amenazó en barrer los Cuartos con una extraordinaria faena del ex Sionista, Lisandro Rasio.
El Talón de Aquiles del “Rojo” fue el andar intermitente de Víctor Hugo Cajal y Gonzalo Laphitzborde, como especialmente las pronunciadas discontinuidades y pésimos porcentuales de Gregory Dilligard desde la Línea, en realidad falla rotunda de “Las Aguilas”.

Hoy, es innegable, Echagüe se ve apremiado por estar al borde de quedar eliminado. Por ende, el presionado es el conjunto de la capital entrerriana. Pero, como intentando modificar una historia con profunda discontinuidad en su andar de local, los dirigidos por De Cecco van en busca de ese 5° punto que transmita la ansiedad, el nerviosismo, la tirantez a quien fuera el n° de la Serie Regular.

El aliento de su gente será esencial, pero que esa motivación no derive en episodios desagradables dentro y/o fuera de la cancha como los suscitados tras el partido, cuando se tiró un piedrazo al micro de los chaqueños rompiéndole dicho proyectil uno de los vidrios laterales de la unidad.

No es necesario agredir al contrincante para apoyar a la divisa propia. Que sea una gran fiesta. Si gana Echagüe, formidable, y si gana Progresista aplaudir al triunfador porque -sin dudas- demostró ser un gran plantel.
Fotos: Gentileza Prensa AEC.-