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Desde 2017 se votaría con boleta electrónica en todo el país

El bloque de diputados de Cambiemos tendría todo listo para emitir dictamen este jueves al proyecto de reforma electoral, donde, con el apoyo del massismo y el frente que lidera Diego Bossio, consiguió imponer su voluntad de utilizar la boleta electrónica en todo el país en las próximas elecciones de 2017.

 

Los presidentes de la comisión de Asuntos Constitucionales, Pablo Tonelli, de Justicia, Diego Mestre y de Presupuesto y Hacienda, Luciano Laspina convocaron para este jueves a las 12 un plenario en el que prevén emitir dictamen al proyecto y así dejarlo listo para que se debata en el recinto la semana que viene. Estiman que se trataría en una sesión especial el 5 de octubre para luego comenzar su tratamiento en el Senado.

 

Entre las principales y más debatidas reformas está el fin de la boleta de papel y la implementación de la electrónica. Aunque en un momento el macrismo evaluó ceder en parte sobre este punto y contemplar la aplicación solo en algunos distritos en las próximas elecciones, finalmente, gracias al acompañamiento del Frente Renovador y del Bloque Justicialista, se impuso su uso en todo el país desde 2017.

 

Desde el bloque que lidera Sergio Massa adelantaron que acompañarán con sus firmas el dictamen de mayoría luego de que el PRO aceptase introducir cambios respecto a los controles durante la elección. Aunque evitaron dar precisiones al respecto –las negociaciones -según pudo saber Cronista.com- aún siguen adelante- adelantaron que entre esas modificaciones figura una mayor vigilancia de las máquinas para votar a fin de evitar fraudes informáticos.

 

En tanto, el Frente para la Victoria-PJ ya adelantó que votará en contra del proyecto. El principal punto de disidencia es la boleta electrónica la cual consideran un “un sistema fraguable”.

 

Ayer, en declaraciones a Radio Uno, la diputada Diana Conti reiteró el rechazo del bloque y argumentó que se “corre el riesgo de que se convierta en una estafa al voto de la ciudadanía, a la soberanía popular”.

 

“Está comprobado que es un sistema fraguable. Es un sistema que no se aplica en casi ningún país del mundo y quienes lo han aplicado dejaron de hacerlo”, sostuvo.