¿Cuánto respaldo tiene la Prensa entrerriana?
ESPECIAL (por Francisco Pancho Calderón).- El sitio colega Página Política dio a conocer una nota en la cual se hace alusión a la renovación de autoridades en el Sindicato de Prensa de Entre Ríos como a una coyuntura financiera complicada por la cual atraviesa la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa y sus réplicas u ondas expansivas que mancillan al gremio de nuestra provincia.
La lectura del artículo genera, mínimamente inquietud, desasosiego a quienes cumplimos con una función que en la provincia se ha denigrado en forma execrable, resquebrajando viejas conquistas laborales, vulnerándose derechos de diversa índole, esencialmente en cuanto a Libre Expresión y/o cumplimiento estricto de políticas editoriales.
Las líneas redactadas por Federico Malvasio son profundas. De acuerdo a dicho contenido, la organización sindical tiene ahora a Carlos Ferreira como secretario general, un trabajador administrativo de El Diario de Paraná.
En tanto, Osvaldo Couceiro, quien ostentaba el cargo ahora de Ferreira, se desempeña en esta nueva gestión desde el 6 de diciembre como secretario gremial, tras presentarse Lista Única en un proceso electoral particular, según el colega, con no más de cien empadronados, sin darse a publicidad del acto con el necesario rigor por la trascendencia del evento.
La Columna, que puede observarse en el link http://www.paginapolitica.com/provinciales/movimientos-y-cambios-en-el-sindicato-de-prensa.htm no ahorra datos significativos que exponen a Couceiro adversamente, con manifiestos alarmantes habida cuenta que de ello se desprende no es descabellado presuponer se suscite una inminente intervención.
Claro está, que cada lector puede interpretar con distinta visión los dichos ostentados, no obstante vale la pena reconocer la existencia de cáusticos rumores mucho más turbadores en lo referido a episodios vinculatorios al paso de Couceiro como interventor de la Fatpren en el Sindicato de Mendoza.
Sin embargo, hasta tanto no tomen el guante Ferreira y el propio Couceiro, es oportuno dar a conocer estos datos salientes tras un provisorio sondeo realizado esta mañana, consulta exclusiva de Cuestión Entrerriana realizada a 50 periodistas, unos avezados, de notorio predicamento, y otros jóvenes comunicadores.
CUATRO (4): concurrieron al comicio. Sí, solo esa exigua cantidad.
CUARENTA (40): no tenían idea de las elecciones.
SIETE (7): están adheridos al Sindicato.
VEINTE (20): NO avalan ni menos aún RESPETAN la última Mesa Directiva como la actual simplemente por NO saber quiénes están en definitiva a cargo de la misma.
VEINTITRES (23): REPRUEBAN la continuidad de Couceiro.
TREINTA Y SEIS (36): admiten que NUNCA, NADIE, desde el Sindicato les ofreció agremiarse en ésta última etapa.
DIECISEIS (16): se desafiliaron hace poco más de un lustro.
TREINTA Y SIETE (37): se sienten INDEFENSOS, sin RESPALDO ante coyunturas laborales.
Data global
De los 50 entrevistados telefónicamente hubo mayoría de comunicadores de los medios más representativos de Paraná. Solo DOS confirmaron su aprobación a los últimos años de gestión de las autoridades del Sindicato y cuestionaron el anterior mandato, responsabilizándolo de graves irregularidades.
Reflexión
Se podrá cuestionar a Couceiro o a la anterior gestión, pero… Hay algo que -evidentemente- transitando el Siglo XXI, una época de grandiosa evolución tecnológica, viene fallando hace rato desde el Sindicato o desde la misma Federación: lo COMUNICACIONAL.
Es IMPOSIBLE, INAUDITO, INADMISIBLE que un Sindicato de Prensa NO posea un órgano difusor, que trascienda la información cotidiana o usual destinada a sus agremiados.
Debería existir un vínculo informativo que una a la Mesa Directriz, y/u Órgano de Aplicación con sus adherentes y también con la Comunidad en general, más aún, existiendo sectores disidentes.
Lamentamos recalcarlo: es ineludible, inevitable, el pensar que NO SE QUISO dar a conocer Gestión de Gobierno y ello, básicamente, se convierte en una mancha indeleble generadora de dudas, o acaparadora de descrédito.
Conocemos a Couceiro. Con absoluto respeto por su investidura periodística, como en especial marginando toda ponencia concomitante a tipificación moral, lo catalogamos desde hace varios años como un “Operador Sindical” sagaz, astuto, muy vinculado al Poder político.
Poco afecto a “ensuciarse” las manos con luchas reivindicatorias, y muy propenso a tramar y manipular estrategias conciliatorias que arrojen saldos “no sangrientos”.
Obvio… Es NUESTRO parecer… Como él puede rotular o calificar como quiera la Línea Editorial de Cuestión Entrerriana.
Nos gustaría saber si el Sindicato de Prensa de Entre Ríos hoy está NORMALIZADO. Conocer su nueva Comisión Directiva. Que se nos cuente de sus logros, sus obras, sus balances, sus cuentas.
Interiorizanos acerca de cuántos agremiados tiene. Saber por qué hoy, en el 2014, no tiene un área específica para INFORMAR actos de Gobierno, asambleas, elecciones, etc.
Ratificar o rectificar distintas versiones que solo enlodan, mancillan, deshonran al Gremio y sobre todo a sus conductores. Sin ir más lejos, transparentar rumores realmente ultrajantes, acerca de supuestos hechos acaecidos en intervenciones de Couceiro y/o su Equipo Normalizador, en Mendoza y Santiago del Estero.
O, por qué no… se nos ilustre en torno a cuál es la postura que asume el Sindicato en cuanto a tan vergonzosa, ignominiosa, bochornosa precarización laboral en los medios entrerrianos y cómo se “selecciona” la Pauta Publicitaria estatal, favoreciendo a comunicadores “Oficialistas” y castigando a quienes nos comportamos de manera INDEPENDIENTE luciendo nuestra humilde web ni un centímetro de promoción de Gobierno, sea provincial o comunal que no sea lo estrictamente informativo.
La invitación está realizada pese a que en el 2010 hayamos perdido nuestro trabajo en LT 14, tras una absurda medida del ex director Juan Carlos Bettanín, a quien no le interesó en lo más mínimo dejar sin su sueldo no solo a un colega, sino esencialmente a un esposo y padre de Familia que desde 1991 se bancó todas y cada una de las promesas de las distintas administraciones en cuanto al nombramiento en Planta Permanente.
No tuvimos en aquellos días de julio del 2010 la ayuda del Sindicato, ni al día de hoy, pese a breves charlas de café con Couceiro, JAMÁS tuvimos el convite del Gremio en sentarnos a dialogar para siquiera intentar mediar. Y la causa sigue. Y algún día el Estado deberá pagar una millonaria indemnización por semejante daño ocasionado.
Mientras, el Sindicato de Prensa, indiferente. Total, “no es un afiliado nuestro” deben haberse justificado en su indolencia hacia el padecimiento sufrido por un periodista con una trayectoria lindante a las tres décadas.
Indiferencia similar a la del Gobierno. Posturas análogas, afines, ¿convenidas?…