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Condenaron desde cinco años de prisión hasta perpetua a ocho represores en la causa Área Paraná II

La jueza federal Beatriz Estela Aranguren condenó hoy a ocho represores a diferentes penas, que van desde cinco años de prisión a perpetua, por crímenes de lesa humanidad cometidos en perjuicio de 20 personas, en el juicio de lesa humanidad de la denominada causa Área Paraná II.

La jueza determinó que se trataron de “delitos de lesa humanidad, ocurridos en el contexto histórico del Terrorismo de Estado que asoló al país en el segundo genocidio entre 1975 y 1983”, y además ordenó iniciar nuevas causas.

Bajo protocolos sanitarios por la pandemia del coronavirus, la jornada del veredicto de este juicio que comenzó en 2018 inició a las 11.20 y fue transmitida en vivo por el Centro de Información Judicial, la Cámara de Diputados provincial y la agrupación HIJOS.

En la causa se investigó la responsabilidad de los acusados en privaciones ilegítimas de libertad, tormentos, vejaciones, apremios ilegales y otros delitos cometidos contra 20 víctimas entre 1976 y 1977; y el secuestro, desaparición y homicidio del militante peronista Jorge Emilio Papetti, cuando revistaba como soldado conscripto del Ejército en Concordia.

La causa Área Paraná II tramita por el antiguo Código de Procedimientos Penal, por lo que las actuaciones son en su mayoría secretas y todas las decisiones, incluida la sentencia, las toma un solo juez -en este caso Aranguren- y no un tribunal.

Fueron condenados Jorge Humberto Appiani a 13 años de prisión a cumplir en la Unidad Penal 1 de Paraná, donde se encuentra actualmente; y José Anselmo Appelhans y Naldo Miguel Dasso a prisión perpetua a cumplir en sus respectivos domicilios.

También fueron condenados Rosa Susana Bidinost (5 años de prisión); Hugo Moyano (8); Gonzalo López Belsué (8); Guillermo Quintana (9), y Alberto Rivas (7), pero quedaron en libertad debido al bajo monto de las penas, y a que cumplieron parte de ellas en prisión preventiva.

Por otro lado, la jueza ordenó la formación de nueva causa para investigar la responsabilidad penal sobre tres de las víctimas; y extraer las pruebas para generar otra causa sobre el crimen de Papetti y así “determinar otras responsabilidades”.