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Chesini persiste en su lucha contra la droga

El senador apoyó la propuesta que trabaja el Congreso que establece un protocolo de maniobras para habilitar el derribo de aeronaves que no se identifiquen. “La medida puede parecer extrema, tan extrema como los estragos que hace la droga en nuestros jóvenes”.

El senador y candidato a intendente de Gualeguaychú, Osvaldo Chesini, respaldó el proyecto de ley que trabaja el Congreso por el que se establece un protocolo de maniobras para habilitar el derribo de aeronaves que no se identifiquen como también un plazo para la instalación de radares que garanticen el cuidado del espacio aéreo.

“El flagelo de la droga no admite medias tintas. Esta propuesta, a la que podremos adherir una vez aprobada, puede sonar extrema, tan extrema como los estragos que hace la droga en la vida de nuestros jóvenes. Este problema no permite eufemismos y las políticas para terminar con los traficantes, tampoco”, afirmó Chesini.

“Es insoslayable el aumento de la droga. Hay multiplicidad de voces alertando y, sin embargo, no hay reacción. Nos muestran cuánta droga secuestran en diferentes operativos, pero no nos muestran una política de Estado para combatir a los traficantes. Queremos terminar con quienes la venden y trabajar en la recuperación de quienes consumen”, propuso Chesini.

“Entre Ríos debe sumarse ya, junto a Santa Fe y Córdoba, a la instalación de radares, porque esa decisión ayudará a la integración efectiva de la Región Centro y nos pone en pie de igualdad en términos de seguridad ciudadana. A pocos kilómetros de mi ciudad, una familia vive amedrentada por estos vuelos que son también, trágicamente, vuelos de muerte y sin embargo no hay ninguna acción que termine con esa impunidad”, advirtió Chesini.

El proyecto

La iniciativa del diputado Juan Obligio prevé fijar un plazo de 180 días, una vez lograda la ley, para avanzar en forma concreta hacia la protección integral de la frontera, en este caso, norte. Establece asimismo un período de dos años para instalar la red de radares necesaria, y de 18 meses para dotar a la Fuerza Aérea de aeronaves con capacidad de interceptar avionetas ilegales; además de consignar los pasos a seguir para permitir el uso de armamento contra los vuelos irregulares.

En el texto se precisan también seis etapas en la interceptación, antes de habilitarse la destrucción de la aeronave infractora: reconocimiento visual de la aeronave irregular; verificación de datos en el centro de control de vuelos; intento de contacto radial mediante la frecuencia internacional de emergencia; orden de aterrizaje del avión mediante señales visuales; advertencia mediante disparo de munición trazadora; declaración de vuelo hostil y permiso de derribo.