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Aumentó el boleto interurbano entre Paraná y Santa Fe

Pese a que el servicio es cada vez más deficiente, con unidades muy descuidadas, con horarios y/o frecuencias que no se respetan, sin una organización eficaz que evite el caos en ambas terminales a la hora de formarse interminables hileras, las tarifas de los boletos del transporte interurbano que une a Paraná y Santa Fe se actualizaron sin una oportuna y amplia difusión. Galería de fotos registradas en estaciones de las dos capitales litoraleñas.

 

Se concreta así la tercera suba mensual consecutiva, puesto que ya se habían consumado incrementos en los meses de agosto y septiembre, siendo la sexta en el transcurso del 2018.

Caber recordar que en enero el costo del pasaje era de 11,50 pesos; en febrero trepó a 15,50 pesos; desde abril, el boleto escaló a 17,20 pesos; y a partir del 1 de junio, pasó a valer 19,10 pesos. En agosto, alcanzó a los 21 pesos, en septiembre se amplió a $23; y a continuación damos la actualización cristalizada:

 

Seguimos sosteniendo que uno interpreta sanamente y sabiamente la crisis por la cual atraviesa el país, y estamos convencidos que las empresas sufren el embate furioso de la inflación, de la devaluación, de los altísimos costos de inversión para mantener y/o hasta renovar el servicio adecuadamente, pero también concebimos que desde ETACER y Fluviales no se vislumbran cambios que mitiguen cada suba, con un elevar la calidad del servicio que se brinda.

 

Más bien, es todo lo contrario. Unidades sucias, descuidadas, malolientes, que se rompen en pleno viaje, falta de control absoluto en cuanto a los pasajeros que se suben, muchas veces en condiciones higiénicas deplorables o hasta en estado de embriaguez o bajo los efectos de cualquier clase de sustancia ilícita.

Ni hablar de lo que se vive en cada previa a tomar un micro interurbano, con filas extensísimas, sin la más básica comodidad y hasta con el riesgo inminente de conflictos por las de por sí ya archi-conocidas “coladas”, algunas veces impuestas agresivamente por personas que no debería autorizarse su ingreso a los micros.

 

El viajar entre Paraná y Santa Fe suele ser un castigo. Hay ocasiones en que uno tiene la fortuna de coincidir con una unidad moderna, pero ni siquiera hay servicios “Diferenciales” para quienes desean trasladarse en un marco de confort elemental, sin soportar episodios desagradables de toda índole.

Defenderemos a rajatabla el DERECHO congruente de las empresas A NO PERDER PLATA y hasta coincidimos que todo empresario que invierte debe aspirar a GANAR. Pero no avalamos que se GANEN FORTUNAS a costas de los padecimientos y hasta riesgos de los pasajeros.

 

Por ello, consolidamos la idea… Mientras la CNRT no actúe como debe actuar, y mientras los pasajeros NO FORMULEN SUS DENUNCIAS APROPIADAMENTE, todo seguirá igual.
De hecho, esto NO ES DE HOY; es de hace décadas.